VAMOS POR UNA CONSULTA POPULAR!! - Solicitada

En el marco de una de las movilizaciones más masivas de la historia argentina, con millones de personas expresándose en torno del Congreso, en todas las ciudades y pueblos del país, en el Senado de la Nación triunfó el Vaticano.

Las presiones de la Iglesia fueron materiales y políticas. En medio del derrumbe económico y el ajuste, ofrecía sus oficios de “contención” social frente a la escalada fondomonetarista. A cambio, exigía frenar este derecho crucial de las mujeres trabajadoras. Pero este pacto terminó sacando a la luz algo que no es novedoso: el compromiso de hierro que une a los partidos del régimen, de uno y otro lado de la "grieta", con el clero.

El rechazo del proyecto de ley que consagra el derecho al aborto pone en clara evidencia, si faltaba, la dominación del aparato de la Iglesia y del Vaticano sobre el Estado, y el acierto, por lo tanto, de ligar la reivindicación del derecho al aborto legal, seguro y gratuito a la separación de la Iglesia del Estado.

Para las mujeres movilizadas, el resultado adverso no ha significado una desmoralización sino un incentivo para continuar con la lucha.

El movimiento de la mujer es uno de los más poderosos de la historia popular de Argentina. De la orientación política que siga de ahora en más, puede salir más fortalecido y radicalizado, y convertirse en un factor aún más importante en la crisis política presente y en un ascenso general de la clase obrera.

Los planteos de postergar esta lucha en aras de pasar a un próximo turno electoral, que hoy se ubican tanto en el campo del macrismo como en boca de la ex presidenta CFK, deben ser clarificados y a su turno fuertemente repudiados.

La pelea es hoy. Y de inmediato debemos poner en debate las iniciativas en curso, fomentando el intercambio asambleario de las que se han movilizado en todo el país. Colocamos a debate la iniciativa de impulsar una consulta popular vinculante, que es un recurso político que habilita el enorme despliegue popular.

La posición realmente consecuente sobre la consulta es que fuera, digamos, autoconvocada por el movimiento de mujeres en lucha, mediante la presentación de un número de firmas en sede judicial, para que se ponga a votación el proyecto votado en Diputados, a partir del movimiento de mujeres, en forma directa, sin mediaciones legislativas ulteriores.

Tomar en nuestras manos la consulta popular nos permitiría introducir una herramienta novedosa, que tendría su anclaje en la actividad cotidiana de este enorme movimiento, buscando incentivar el debate, acercar expresiones de apoyo en todos los terrenos y así trabajar abiertamente para combatir el poder de la Iglesia.

Organicemos asambleas en todos los lugares de trabajo y de estudio donde hagamos un balance común e impulsemos la consulta popular. Es el modo de sumar nuevos sectores del movimiento de mujeres.

¡Vamos mujeres! El momento de proponer salidas de lucha es ahora.

El único método que eleva la conciencia de clase y la conciencia política de las masas es la acción directa y la movilización, y la que más se acerca a la posibilidad de una victoria.

Plenario de Trabajadoras. Partido Obrero Chacabuco